Como tratar con las ofensas
Las Ofensas de gente desconocida las puedes soportar, pero la de los íntimos, te atrapan, ya que el que te conoce íntimamente te puede herir íntimamente.
¿Puedes repetir conmigo? Este es el día que el Señor ha Creado, me gozare en El, este es el día en que las bendiciones de Dios me sorprenderán, hoy me preparo para recibir cosas buenas de Dios. Hecho está
He llamado a este tema: como tratar con las ofensas, tú hoy día vas a aprender una enormidad, lee conmigo
Lucas 17: 1
Luego dijo Jesús a sus discípulos: Los tropiezos son inevitables, pero ¡ay de aquel que los ocasiona!
Ahora, tu podrías decir: ¡A mi me han ofendido de una manera cruel! Jamás pensé que eso me iba a ocurrir, pero, es imposible que eso no te ocurra, ¿quién lo dijo? El Señor, así que en el momento que te ofendieron no te ocurrió nada que el Señor no haya predicho.
La raíz de la palabra ofensa o tropiezo viene de: “escandalizo”, que da origen a la palabra escándalo, además escandalizo también era una parte de una trampa donde se ponía la carnada.
¿Sabes que permanecer resentido por una ofensa es una de las grandes trampas del diablo? Cuando tu aceptas estar ofendido, has caído en la trampa, y te voy a explicar por qué.
Una trampa, para ser efectiva necesita dos componentes
Número 1: La trampa tiene que estar escondida, porque si tu la ves, obviamente no te dirigirías a ella, déjame contarte una anécdota: estuve en Cuba hace un par de años, y conversé con un cubano que había perdido su pierna en Angola, en un lejano país del África, y la perdida de su pierna
se debió a que el ingresó a un campo minado sin saberlo, y al pisar una mina antipersonal, ésta, explotó destruyendo totalmente su pierna, ¿te das cuenta el enorme daño que puede causar una trampa?
Número 2: Una trampa necesita también una carnada. Siempre hay comida gratis en la punta de un anzuelo. Si una trampa tiene una buena carnada y además esta bien escondida, eso la constituye en una buena trampa. De eso es precisamente de lo que quiero hablarte, de cómo millones de personas han caído en la trampa de estar ofendidos. ¿Estas ofendido? ¿Estas molesto? ¿No has perdonado? ¿Estas maquinando tu venganza? Si estas en esas circunstancias, entonces has caído en la trampa.
Y debes saber que esa trampa te rompe, y mutila tu alma, y lo más sorprendente es que no te das cuenta que realmente fuiste entrampado, por lo tanto no puedes hacer un diagnostico correcto de tu situación, ya que no puedes resolver aquello cuya existencia no reconoces.
No Puedes Evitar que Vengan las Ofensas
Consideremos el caso de David:
Salmo 55: 12-14
“...12 Porque no me afrentó un enemigo, Lo cual habría soportado; Ni se alzó contra mí el que me aborrecía, Porque me hubiera ocultado de él; 13 Sino tú, hombre, al parecer íntimo mío, Mi guía, y mi familiar; 14Que juntos comunicábamos dulcemente los secretos, Y andábamos en amistad en la casa de Dios.
Ahora bien ¿quién te ofendió? Acaso el que servía junto contigo al Señor, el que era parte de tu discipulado, el que ayudaste cuando estaba sin trabajo, eran tan amigos que se contaban los secretos, hasta le abriste tu casa. ¿Puedes entender entonces a David? El dijo: si hubiera sido un enemigo no me hubiese dolido. Por ejemplo: Piensa en alguien desconocido, tu vas en tu auto y alguien te grita “estúpido“seguramente no le darías ninguna importancia, porque no le conoces, pero David dice: fuiste tú compañero, con el cual andábamos en amistad en la casa de Dios.
Jesús lo dice con insistencia: “No podemos impedir que vengan las ofensas”
Las Ofensas de gente desconocida las puedes soportar, pero la de los íntimos, te atrapan, ya que el que te conoce íntimamente te puede herir íntimamente. Puede revelar secretos que tú le confiaste, debido a que tuvo acceso a tu intimidad, y eso te puede provocar un dolor letal.
Ese dolor letal bloquea tu creatividad, cancela la unción del Espíritu como el mayor poder operativo que reside en ti, por eso, estar ofendido es un lujo demasiado caro que no podrás pagar.
Dos Grupos de Gente Ofendida
El primer grupo: Los que han sido tratados injustamente ¿te han tratado injustamente? Si es así, ya estás en un grupo.
El segundo grupo: son los que creen que han sido tratados injustamente. ¿Por qué razones? Por estas: rumores, comentario, y malas interpretaciones, y debido a estas, llegaron a la equivocada conclusión de que los trataron injustamente.
¿Recuerdan la historia del rico y Lázaro?, espero que si. El rico tenía una vida espléndida, muchos banquetes, y todo tipo de comodidades, en cambio Lázaro estaba en la puerta del palacio, empobrecido y lleno de llagas, al punto que hasta los perros lamían sus heridas, sin embargo lázaro murió y fue al cielo, también murió el rico y fue al infierno, ¿Cuál sería el peligro de una interpretación superficial de esta historia? Validar la pobreza y tomar a Lázaro como modelo, (craso error). Lo que quiero rescatar para ti de esta historia es el hecho de que los perros lamian sus heridas, en el lenguaje de Cristo, perro es Goym, que significa una persona gentil, que no era judío ¿Has observado que siempre alrededor de una persona herida hay gente lamiendo sus heridas? ¡Por favor! Por lo que más quieras, cuídate de esta gente, ya que son asignados por las tinieblas a tu vida.
Estos últimos años con nuestro equipo de trabajo, hemos tenido que aprender a cerrar puertas, y eso la gente no lo entiende, porque no hemos dejado que los perros laman nuestras heridas, siempre habrá perros disponibles para hacer ese trabajo sin cobrar ni un solo centavo.
Proverbios 18:19
“...19El hermano ofendido es más tenaz que una ciudad fuerte, Y las contiendas de los hermanos son como cerrojos de alcázar...”
Trata de convencer a una persona ofendida de que esta equivocada, y verás cuan difícil es lograrlo, este pasaje declara que, “El hermano ofendido es mas tenaz que una cuidad fuerte, y las contiendas de los hermanos son como cerrojos de alcázar” ¿Tú sabes lo que es una alcázar? Yo estuve en España, país de contrastes, donde conviven lo súper moderno con lo antiguo, de modo que puedes viajar por una autopista a 120 Km por hora, y desde tu auto ver los alcázares que eran pequeñas ciudadelas, rodeadas de murallas que las protegían con enormes puertas de madera, provistas de fuertes cerrojos de hierro, y dentro de ellas se protegían la gente que vivía en comunidad, ya que, durante la noche las puertas se cerraban y nadie podía entrar ni salir. Del mismo modo millones de personas están encerradas en el alcázar de la ofensa.
Permíteme decirte algo con todo mi corazón, estar herido es un pecado que no parece pecado, pero lo es, ya que el mismo Dios que dijo no adulterarás, también dijo: no debes estar ofendido.
El ofendido esconde su herida bajo el manto del orgullo, y aún puede convencerte de que tiene razón de estar herido. El te dice: ¡Yo estoy herido con razón! ¡Todo lo que di y mira como me pagan!... ¿Parece razonable verdad? Pero aún así esta totalmente equivocado. Jamás debes aferrarte a la ofensa, hay un perdón que suena de esta manera: ¡He perdonado a todo esos idiotas! ¿Notas algún error en la frase?
Compra Oro Refinado
Vamos a leer un pasaje bien extraño en el libro de Apocalipsis
Apocalipsis 3: 18
“...18Por tanto, yo te aconsejo que de mí compres oro refinado en fuego, para que seas rico, y vestiduras blancas para vestirte, y que no se descubra la vergüenza de tu desnudez; y unge tus ojos con colirio, para que veas...”
No existía en todo Asia menor gente tan orgullosa como la de la iglesia de la Odisea, ellos creían que lo tenían todo y que no les faltaba nada, sufrían de megalomanía, pensando que eran perfectos algo así como la cuarta persona de la trinidad. A esta gente el Señor les dice: “Ustedes están ciegos y desnudos en una condición espiritual deplorable, y el colirio que yo les ofrezco es para que sus ojos sean abiertos”
Anhelo profundamente que los ojos de mucha gente sean abiertos a través de este blog incluyendo los tuyos, y que puedas salir de la trampa de la herida, ya que, la primera victima de esa herida eres tú mismo.
Jesús describe la característica de la gente del último tiempo
Mateo 24:10 -13
En aquel tiempo muchos se apartarán de la fe; unos a otros se traicionarán y se odiarán; y surgirá un gran número de falsos profetas que engañarán a muchos. Habrá tanta maldad que el amor de muchos se enfriará, pero el que se mantenga firme hasta el fin será salvo.
La palabra clave aquí es “amor ágape” que es el amor de Dios impartido a nosotros, Jesús mismo fue traicionado y herido en casa de sus amigos, según las palabras del profeta Zacarías, pero Él en un cuerpo igual que el tuyo ganó la batalla de estar herido.
Quiero contarles un testimonio personal: El año pasado también fui traicionado, y estando en un estado de tristeza y dolor, me encerré en mi oficina a celebrar mi fiesta de lastima, y estando en eso, sonó el teléfono, me llamaba un amigo que tiene una clara unción profética, y me dijo: Lucas, a ti te pasa algo, yo le conteste, tratando de acortar la conversación: estoy bien, el me detuvo y me dijo: no es así, luego insistió, el Señor me dice esto, te traicionaron , y me manda a decirte tres cosas:
1.- La única persona que puede herirte es aquella que pones en tu corazón, cuida a quien pones ahí.
2.- Después de una gran tormenta inevitablemente viene una gran victoria.
3.- Nunca digas que los tiempos pasados fueron mejores, cuando tú dices eso, nunca estás hablando con sabiduría.
Cuando tu te haces mucha expectativa de la gente o de alguien, estas preparando el camino para ser ofendido, estas pavimentado el camino para una ofensa, porque esa persona en algún punto no va a estar a la altura de tu expectativa, si tu no te haces ninguna ilusión con la gente, cualquier cosa que hagan va a hacer una bendición. “Entonces, cuida al que pones en tu corazón”
1 Corintios 6: 7 – 8
“...7Así que, por cierto es ya una falta en vosotros que tengáis pleitos entre vosotros mismos. ¿Por qué no sufrís más bien el agravio? ¿Por qué no sufrís más bien el ser defraudados?8Pero vosotros cometéis el agravio, y defraudáis, y esto a los hermanos...”
Es parte del oficio, acepta el agravio, rompe el cheque, no te vengues, la venganza es del Señor, no es tuya, toda ofensa produce una deuda y toda deuda debe ser pagada, un abogado esta para probar que alguien te debe, y eso tiene que ser saldado, ya sea con dinero, o con cárcel, y eso es venganza. José procedió de una manera distinta.
Génesis 50: 19- 20
“...19Y les respondió José: No temáis; ¿acaso estoy yo en lugar de Dios? 20Vosotros pensasteis mal contra mí, mas Dios lo encaminó a bien, para hacer lo que vemos hoy, para mantener en vida a mucho pueblo...”
José pudo haber escrito un libro con el siguiente titulo: “Las cosas que nadie me dijo que me iban a pasar por causa de mi llamado”, fue calumniado, vendido como esclavo, estuvo en prisión por trece años y otras cosas más. Yo siento vergüenza de comparar mis sufrimientos con los de José y sin embargo el jamás aceptó estar herido. Un hombre así debe ser promovido al lugar más alto que Dios pueda asignar.
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